El pequeño y pintoresco pueblo alguna vez luchó por controlar la multitud de turistas que atraía, ahora se pregunta si alguna vez volverá a ser tan popular.
Ubicado en la región de Salzkammergut con lagos y montañas al este de Salzburgo, el pueblo atrajo la atención por sus esfuerzos para restringir la afluencia de turistas que superaban en número a los residentes cuya población era de 760. El pueblo debe su popularidad entre sus turistas asiáticos a un pueblo de Corea del Sur. que contó con su réplica en China. Las autoridades esperan que su estatus como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y su reputación ayuden a que su economía dependiente del turismo reviva después de la pandemia.
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